“Este es el género de información que la Organización del Tratado del Atlántico Norte no desea que se haga pública”, apunta un ex funcionario del organismo sobre el hackeo
Por múltiples motivos, la guerra de Ucrania ha probado de qué manera los piratas informáticos pueden trastocar el resultado de un conflicto armado. No solamente se trata del avance en tecnología asimismo de la localización geográfica y los actores implicados: de forma tradicional Rusia es uno de los países que cuenta con los piratas informáticos con mayores y mejores herramientas para hacer esta clase de delitos. El último caso es uno de los más graves ya que afecta a la Organización del Tratado del Atlántico Norte y trataría sobre la filtración y venta de datos de documentos militares clasificados vendidos on line.
Los datos se habrían filtrado desde la compañía MBDA Missile Systems, con sede en Francia e incluyen incluyen planos de armas que emplean los aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte en la guerra de Ucrania. MBDA es uno de los líderes en el mercado de fabricación y desarrollo de misiles y trabaja con prácticamente cien fuerzas armadas del planeta. La compañía aceptó que sus datos estaban entre la información hackeada… mas que ninguno de los ficheros clasificados pertenece a ellos. La información habría sido pirateada desde un disco duro externo comprometido perteneciente a uno de sus distribuidores.
En declaraciones a la gaceta Fortune un portavoz de la Organización del Tratado del Atlántico Norte aseguró que “estamos valorando reclamos relacionados con datos presuntamente robados de MBDA. No tenemos rastros de que alguna red de la Organización del Tratado del Atlántico Norte haya sido comprometida”.
Por su lado, representantes de MBDA no negaron el ataque, si bien sí apuntan que “no se trata de datos clasificados ni sensibles”, rebatiendo las aseveraciones de los piratas informáticos sobre lo que venden.
Y es que conforme con la BBC, ciberdelincuentes que operan en foros de discusión en ruso e inglés, venden ochenta GB de los datos robados por quince Bitcoins (más o menos euros 260.000) y aseveran que ya han vendido los documentos a cuando menos un comprador.
En el anuncio de la oferta, los piratas informáticos aseveran tener “información clasificada sobre el desarrollo de proyectos militares cerrados, como documentación de diseño, dibujos, presentaciones, materiales de vídeo y fotografía, pactos establecidos y correspondencia con otras empresas”.
La propia BBC habría recibido una muestra gratis de cincuenta MB de los datos, que incluye documentos etiquetados como “CONFIDENCIAL DE LA OTAN”, “RESTRINGIDO DE LA OTAN” , “Información controlada no clasificada” y dos marcados como “SECRETO DE LA Organización del Tratado del Atlántico Norte”. Estos últimos dos, si se confirma el hurto, estarían en el segundo nivel de clasificación de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, que lo cataloga como “la divulgación no autorizada ocasionaría graves daños a la OTAN”.
En declaraciones a la web británica, un ex funcionario de la Organización del Tratado del Atlántico Norte aseveraba que “hay mucha sobreclasificación en la Organización del Tratado del Atlántico Norte, mas estas etiquetas son esenciales. El SECRETO DE LA Organización del Tratado del Atlántico Norte no se aplica a la ligera. Este es verdaderamente el género de información que la Organización del Tratado del Atlántico Norte no desea que se haga pública”. Y asimismo añadió que las posibilidades de que los documentos hayan sido desclasificados eran escasas teniendo presente que la mayor parte de los ficheros parecían haber sido creados entre dos mil diecisiete y dos mil veinte.