Sociedad

La importancia de dejar un cuadro en buenas manos

Invertir en una obra de arte compensa y además se puede personalizar

En varias ocasiones nos hemos encontrado con noticias que nos cuentan cómo una obra de arte de inmenso valor ha sufrido la chapuza de una restauración mal hecha que ha dejado el valioso cuadro en formato casi de caricatura. Y si algo nos ha quedado claro es que la pintura al óleo hay que dejarla en manos de profesionales auténticos.

Los retratos personalizados al óleo son inmortales si se cuidan bien (evitando entre otras cosas la exposición directa al sol) por lo que además de una joya, son un valioso recuerdo para la posteridad. La Gioconda de Da Vinci es el retrato al óleo más reconocido en el mundo, y el mejor ejemplo de cuánto puede llegar a transmitir una obra de arte. Un nivel mágico al que nunca podrá llegar una fotografía por muy buena que sea.

Aumenta la tendencia de los cuadros en España por encargo, confirmando una moda que en realidad nunca se ha ido porque puede ser uno de los regalos más especiales que se pueden hacer a un ser querido. Eso sí, hay que asegurarse siempre de que encargamos el cuadro a un verdadero artista, de los que llevan años entre lienzos y pinceles, para evitar sorpresas desagradables.

Para localizar unas buenas manos para nuestro retrato se puede consultar more retratosdeencargo e informarse antes de adquirir un cuadro sobre qué estilo es el que más nos gusta. Porque los enfoques son diferentes. ¿Con qué técnica se expresa mejor? Pues depende de gustos. Por ejemplo, para el surrealismo se necesita dibujar muy bien, por lo que muchos encuentran mejor resultado en el impresionismo y el expresionismo.

En la página web aquí de Luís Touriño se pueden encontrar buenos ejemplos de retratos por encargo, de cuadros a medida y reproducciones de obras maestras. Porque ésta última es otra tendencia a tener en cuenta. A quién no le gustaría tener en casa una reproducción idéntica de su obra favorita a un precio asequible.

A la hora de elegir entre una pintura al óleo sobre lienzo o sobre tablilla, es cierto que el lienzo sigue siendo el soporte favorito para muchos pintores pero la madera o tablilla es considerada por la mayoría de restauradores como el soporte ideal porque estas pinturas pueden llegar a conservarse durante siglos.

Las obras dan un toque personal a cualquier hogar e incluso oficinas. Cada vez están más presentes como decoración en espacios públicos que se transforman en un entorno más confortable.

Cuando las copias sólo son copias

Tener la reproducción de una obra de arte es un placer, que puede pasar a disgusto para quienes estaban convencidos de haber adquirido un cuadro original. En España ha estado ejerciendo durante años uno de los mayores falsificadores del mundo. Él y su socio colaron cuadros de Dalí, Picasso o Miró por Europa y Estados Unidos.

Sus falsificaciones eran de tal calidad que pusieron en serios apuros a los analistas periciales más exhaustivos, en una muestra de que podemos llegar a adquirir para nuestra casa reproducciones de cuadros con calidades bastante logradas.

Cuánto valen las obras de arte

Es difícil poner un precio a las joyas de los grandes artistas de la historia, pero para hacernos una idea el cuadro por el que más se ha pagado es Salvator Mundi, de Leonardo Da Vinci, que llegó a 450 millones de dólares. Por un precio bastante más módico se puede recurrir a un artista para encargarle una reproducción de las que vale la pena tener en casa.

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