Ventajas de apostar por tarjetas de visita troqueladas
Las tarjetas de visita son un elemento discreto, pero eficaz, de hacer publicidad y generar afiliación con la marca. Utilizar tarjetas de visita diferentes, que se salgan de lo habitual, sin necesidad de traicionar ninguno de los aspectos distintivos de una marca o negocio puede ser una de las mejores formas de destacar por encima del resto y crear una buena impresión en los usuarios.
Y es ahí donde se tiene que hablar de las tarjetas troqueladas. Estas tarjetas, que pueden ser de visita, de presentación y demás, tienen la particularidad de que están realizadas en un papel de mayor gramaje o grosor con respecto a las tarjetas de visita tradicionales, por lo que al tacto generan una sensación distinta que se considera tipo premium. Pero además, al ser troqueladas, se apuesta por los cortes con forma mediante tecnología láser, lo que puede hacer que su tarjeta de visita se convierta en un elemento distintivo de la marca, en una causa misma de generar fidelización y ganas de volver a comprar.
Marketing directo y efectivo
Una de las razones por las que siempre conviene invertir en material publicitario, como el caso de las tarjetas de visita, es que responden a ser uno de los elementos de marketing directo más efectivos en la actualidad, porque permiten agrupar dentro de su cuerpo toda la información publicitaria y de contacto que el propietario quiera, lo que a su vez repercutirá en que se refuerce la imagen de marca desde la perspectiva de los clientes.
De esta manera, una tarjeta de visita puede ser también ideal para incluir códigos QR, aspectos interactivos y promociones especiales, que sirvan para recordar a la marca como sinónimo de sus servicios o productos, algo que en términos de marketing se traduce en mejores ventas cruzadas o incrementales.
Originalidad, con todo lo que eso conlleva
Las marcas grandes, casi siempre, sucumben ante las marcas que son muy originales. La originalidad y la creatividad no tienen límites, e incluso son capaces de amoldarse notoriamente a la identidad de una marca o de una empresa con tradición en su ramo.
Apostar por tarjetas de visita troqueladas permite utilizar el arte y el corte para plasmar una idea, una intención y una sensación en la mente de sus clientes, sea mediante el tacto o mediante las sensaciones visuales.
Así, por ejemplo, las marcas de comida o de pastelería pueden utilizar tarjetas de visita troqueladas con un corte de mordisco en uno de sus bordes; las marcas de fabricación de muebles pueden troquelar sus tarjetas para que las perforaciones se asemejen a una estructura de los productos que realizan, o un taller mecánico puede utilizar tarjetas troqueladas y con relieve similares a la textura de un neumático.
La originalidad consigue perdurar en la mente y en la intención de compra de los clientes, y una simple tarjeta de visita puede marcar la diferencia en ese aspecto.
Diferenciación ajena a la saturación tecnológica
Aunque hay que admitir que actualmente una tarjeta troquelada puede encargarse en sitios especializados y directamente por internet sin tener que visitar ninguna agencia física, las tarjetas de visita, como elemento de marketing, tienen una diferencia importante con las estrategias de marketing que actualmente utilizan la mayoría de las empresas, y que seguramente también utilizan los competidores directos, no tienen nada que ver con internet.
Funcionan al tacto, fuera de las tecnologías y eso permite no tener competidores directos, por lo que destacar será tan fácil como sencillamente entregarla a los usuarios o incluirla dentro de la bolsa de su compra, para que al verla sientan una experiencia diferente, no relacionada con la invasión o saturación publicitaria a la que otras empresas y marcas seguro que le tienen acostumbrado.Destacar, en marketing, en fidelización, en perdurar en la mente de los clientes, a menudo implica ser diferentes y originales, en lugar de gastar más dinero. Una tarjeta de visita troquelada es un buen ejemplo de ello.